La borra de la soya (el sobrante de la extracción del aceite de soya) se puede convertir en un ventajoso biocombustible, según una investigación de la Universidad de Sao Paulo. Una nueva técnica aprovecharía el residuo de la industria aceitera con la gran ventaja de reducir el proceso de transformación de 24 a 30 minutos, empleando un catalizador reutilizable compuesto por cobre y vanadio.
Brasil genera aproximadamente 30 millones de litros de borra de soya, que son lanzados a vertederos. Esta vendría a ser una gran alternativa para contrarrestar la contaminación generada por este proceso y también proporcionará 300 millones de litros de biodiesel, el mismo que según las investigaciones realizadas seria de excelente calidad.
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